La tendinitis del supraespinoso es una lesión que afecta al tendón del músculo supraespinoso, que se encuentra en la parte superior del hombro. Este tendón es responsable de estabilizar el hombro y ayudar en la elevación del brazo.
La tendinitis supraespinoso se produce cuando el tendón se inflama y se irrita debido a una lesión, sobrecarga o degeneración natural debido al envejecimiento. Los síntomas pueden incluir dolor en el hombro, especialmente al levantar el brazo por encima de la cabeza, debilidad en el brazo y dificultad para realizar ciertas actividades, como peinarse o vestirse, e tareas simples como hacer la cama.
La tendinitis del supraespinoso puede ser especialmente dolorosa durante el sueño porque la posición de descanso puede poner una mayor presión en el hombro afectado y provocar una mayor inflamación y dolor. Además, durante el sueño, las posturas pueden cambiar con frecuencia y la persona puede mover el brazo afectado sin darse cuenta, lo que también puede aumentar el dolor.
Otro factor que puede contribuir al dolor durante el sueño es el aumento de la tensión muscular en la zona afectada. Esto se debe a que, durante el sueño, los músculos tienden a relajarse y si los músculos del hombro afectado se han debilitado debido a la tendinitis, los músculos que lo rodean pueden tensarse para compensar la debilidad y provocar dolor.
Para reducir el dolor durante el sueño, se recomienda dormir en una posición que reduzca la presión sobre el hombro afectado, como dormir de lado con un cojín entre el brazo y el torso o dormir boca arriba con un cojín debajo del brazo afectado. También es importante evitar las posturas que puedan aumentar el dolor y mantener los músculos del hombro afectado relajados mediante la realización de ejercicios de estiramiento y fortalecimiento.
La movilidad del hombro puede verse reducida en una tendinitis debido al dolor y la inflamación que se produce en los tendones afectados. Los tendones son tejidos fibrosos que conectan los músculos con los huesos y son los responsables de transmitir la fuerza muscular al esqueleto.
Cuando se produce una tendinitis en el hombro, los tendones inflamados pueden rozar contra las estructuras óseas cercanas y causar dolor intenso. Este dolor puede limitar el rango de movimiento del hombro, especialmente en determinadas posiciones. Además, el dolor también puede provocar una reducción en la fuerza muscular, lo que también puede limitar la movilidad del hombro.
Un pérdida de movilidad sin dolor puede ser la antesala de una tendinitis
De otra parte, el sistema nervioso puede reducir la movilidad del hombro como una respuesta protectora al dolor. Cuando los tendones del hombro están inflamados o dañados, los receptores del dolor en la zona afectada envían señales al cerebro que indican que hay dolor.
En respuesta, el cerebro puede enviar señales a los músculos que rodean el hombro para que se contraigan y limiten el rango de movimiento del hombro. Este proceso se conoce como «reflejo de protección» y tiene como objetivo proteger la zona lesionada y reducir el dolor.
Si bien esta respuesta puede ser beneficiosa en el corto plazo para evitar más lesiones, a largo plazo puede llevar a una reducción permanente en la movilidad del hombro si no se trata adecuadamente la causa subyacente de la lesión o inflamación.
El músculo supraespinoso tiene su origen en la escápula, también conocido como omóplato, y es uno de los cuatro músculos del manguito rotador que se encuentra en la parte superior del hombro y ayuda a estabilizar la articulación del hombro. La disfunción del músculo supraespinoso puede llevar a cambios en el movimiento de la escápula, lo que puede agravar los síntomas de la tendinitis.
Por esta razón, el tratamiento de la tendinitis del supraespinoso a menudo incluye ejercicios específicos para fortalecer el músculo supraespinoso y mejorar la función de la escápula. También puede incluir terapia física para mejorar la movilidad del hombro y reducir el dolor y la inflamación.
El fortalecimiento de los músculos de la espalda cuando se padece de tendinitis del supraespinoso es determinante por estas tres razones:
La respiración puede afectar indirectamente una tendinitis del supraespinoso en el hombro, ya que los músculos respiratorios pueden estar conectados a los músculos del cuello y los hombros, y pueden influir en la postura y la posición de los hombros.
De hecho una respiración superficial y torácica puede llevar a una tensión y acortamiento de los músculos del cuello y los hombros, lo que puede agravar los síntomas de una tendinitis del supraespinoso. Por otro lado, una respiración más profunda y diafragmática puede ayudar a reducir la tensión en los músculos del cuello y los hombros y mejorar la postura.
Posturas no equilibradas, como la posición de cuello hacia adelante y la joroba de la espalda, pueden poner más presión en los músculos del hombro y agravar la tendinitis del supraespinoso. Es importante mantener una postura adecuada y evitar mantener una posición durante un tiempo prolongado para minimizar el riesgo de agravar la tendinitis.
Por esta razón, es recomendable que las personas con tendinitis del supraespinoso presten atención a su respiración y mantengan una postura adecuada para reducir la tensión en los músculos del cuello y los hombros. Profesionales como fisioterapeutas o entrenadores personales pueden ayudar a desarrollar un plan de ejercicios específico que incluya ejercicios de respiración y posturales que puedan mejorar la salud del hombro y reducir los síntomas de la tendinitis.
La expansión de las costillas en las tres direcciones (anterior, lateral y posterior) es importante para permitir un movimiento óptimo de la escápula porque las costillas y la escápula están conectadas a través de los músculos y tejidos que las rodean. Los músculos de la respiración y el diafragma también se conectan a las costillas y pueden influir en la posición y movimiento de la escápula.
Cuando las costillas están restringidas en su movimiento, ya sea debido a una postura incorrecta o una respiración superficial, los músculos y tejidos que las rodean pueden volverse tensos y acortados, lo que a su vez puede limitar el movimiento de la escápula, por ejemplo en la tendinitis del supraespinoso. Además, si la respiración es superficial, es posible que el diafragma no se contraiga adecuadamente, lo que puede afectar la postura y el movimiento de los hombros y la escápula.
Por otro lado, si las costillas están expandiéndose de manera equilibrada en las tres direcciones, los músculos y tejidos que las rodean estarán más relajados y flexibles, lo que puede permitir una mejor movilidad de la escápula. Además, una respiración profunda y equilibrada puede ayudar a estabilizar la columna vertebral y la pelvis, lo que a su vez puede mejorar la postura y el movimiento de los hombros y la escápula.
En la tendinitis del supraespinoso, el masaje terapéutico puede ser utilizado para reducir la inflamación y el dolor en el hombro afectado, mediante movimientos suaves y rítmicos en los músculos y tejidos blandos para reducir la tensión muscular, mejorar la circulación sanguínea y linfática y promover la relajación
La liberación miofascial es una técnica manual que implica la aplicación de presión sostenida y controlada en los tejidos conectivos del cuerpo para liberar la tensión muscular y mejorar la movilidad, muy recomendado en lesiones como tendinitis del supraespinoso.
Masajes terapéuticos, liberación miofascial, uso de ganchos o punción seca son algunas de la técnicas de fisioterapias indicadas para la tendinitis del supraespinoso
El tratamiento de ganchos, también conocido como terapia de ganchos o terapia de tejido blando instrumentado, es una técnica de fisioterapia que utiliza un instrumento especializado para tratar lesiones musculares y de tejidos blandos. Se utiliza para romper adherencias y tensiones en los tejidos blandos, estimular la circulación sanguínea y linfática, y reducir el dolor y la inflamación.
En el caso de la tendinitis del supraespinoso, la punción seca puede ser efectiva en la reducción del dolor y la inflamación y en la mejora de la función del músculo afectado, especialmente cuando se combina con otros tratamientos, como el fortalecimiento muscular y la fisioterapia manual.
El fortalecimiento de la espalda es esencial para mejorar la postura, la estabilidad del hombro y reducir la carga sobre el hombro afectado por la tendinitis del supraespinoso. Esto puede ayudar a aliviar el dolor y mejorar la movilidad del hombro.
